Soy de pelo largo. Bastante largo.
Tengo el pelo rizado, y tenerlo largo me mola. Es un estilismo con el que me siento bastante cómoda. De hecho, al tenerlo rizado, cortarlo por encima de cierta altura no suele sentarme bien. Se riza demasiado y llego a niveles de permanente de yayas (como la mía :P ¡te quiero, yaya!). Hace unas semanas que tenía claro que me lo quería cortar por dos razones principales: para sanear puntas (que desgraciadamente soy de pasar por la peluquería una vez cada seis meses como mucho y mis puntas se resienten de forma considerable) y para verme distinta e innovar un poquitín con mi imagen, que eso siempre renueva autoestima.
El corte que se me antojó, para lo que suelo innovar yo, es bastante atrevido. El término peluqueril es
long bob asimétrico. Algunas versiones de este corte:
Raya a la derecha, largo por la izquierda y algo más corto por la derecha, con un desnivel paulatino. Mi inspiración principal - y lo que utilicé de referencia - fue el corte de Cheryl Cole en estas fotografías:
Anteayer fui a la pelu y pedí el corte. Primero se equivocaron e interpretaron las fotos que les llevé como les dio en gana. Luego lo semi-arreglaron, pero como no quedé completamente satisfecha con el corte, terminé de darle forma en casa (con la magistral ayuda de mi madre) y ahora, ¡simplemente me encanta!
Da un toque sofisticado y chic que me enamora. Es un corte muy versátil y cómodo. El largo que tiene permite hacer recogidos y peinados, incluso una simple cola de caballo. Si defino bien el rizo queda estupendo, si aliso las puntas también, si lo estiro un poco para que quede ondulado queda realmente lindo, así que ¡me lo quedo!